Reseña: Al otro lado del océano (Tahereh Mafi)

Título: Al otro lado del océano

Autor: Tahereh Mafi

Publicación original: 2018

Editorial: Urano

♥ Gracias a Ediciones Urano por el ejemplar ♥

• SINOPSIS •

Es el 2002, un año después del 11 de septiembre. Políticamente hablando, es un momento extremadamente turbulento, en especial para alguien como Shirin, una adolescente musulmana de dieciséis años que está cansada de ser estereotipada. 

A Shirin no le sorprende lo horrible que puede ser la gente. Está cansada de las miradas groseras y los comentarios denigrantes —incluso de la violencia física— que sufre como consecuencia de su raza, su religión y la hiyab que viste todos los días. Por lo tanto, construyó sus paredes protectoras y se rehúsa a dejar que alguien se acerque lo suficiente como para lastimarla. En lugar de eso, ahoga sus frustraciones en la música y pasa sus tardes bailando break con su hermano. 

Pero entonces conoce a Ocean James. Es la primera persona en una eternidad que parece querer conocerla realmente. Eso la aterra —parecen venir de dos mundos irreconciliables— y Shirin tuvo su guardia alta durante tanto tiempo que no está segura de si alguna vez podrá ser capaz de bajarla.

¿Qué encontrarás en éste libro?

Juvenil/ Contemporáneo/ Racismo/ Romance 

Al otro lado del océano es una novela con todos los elementos que amamos: frescura juvenil, un toque de realidad por aquí, una pizca de romance por allá y la pluma de una autora en la que confiamos. La ecuación no se molesta en evadir algunos clichés, como los típicos personajes que encontramos en una escuela secundaria, las hormonas revoltosas que llevan el relato a un inevitable instalove y el leitmotiv de la literatura juvenil: no me importa lo que los demás piensen de mí. Afortunadamente, la autora hace uso de esos elementos no para tener una novela exitosa pero genérica, sino para hablar de temas importantes como lo son el racismo, la intolerancia cultural, religiosa y cualquier otra expresión de menosprecio hacia lo diferente. Porque fabricar nosotros mismos un estereotipo de una persona individual puede ser un arma de doble filo y justamente de esto nos habla su protagonista.

Shirin es una adolescente musulmana de dieciséis años que enfrenta a diario el maltrato no solo de sus compañeros sino de toda la ciudad. No son únicamente las burlas por su hiyab, sino también los continuos comentarios de desprecio a su cultura, su religión y la absurda vinculación que hacen de su identidad con el terrorismo. El clima de constante mudanza tampoco es favorable para Shirin. Su familia siempre busca el bienestar de ella y de su hermano mayor, por lo que ante la mínima posibilidad de un empleo que mejore su condición económica, social y la educación de ellos, ya están desempacando sus pertenencias en un nuevo hogar y abriéndose camino en una nueva escuela, lo que impide a Shirin crear cualquier tipo de vínculo afectivo, ya que al cabo de seis o siete meses ya están abandonando la ciudad en busca de un futuro mejor. Su actual colegio no es una excepción. La atmósfera de discriminación y constante bullying lo único que ha logrado es aislarla del resto de sus compañeros como método de defensa, por lo que la repentina y genuina atención de Ocean durante las clases de Biología, consigue derribar los muros de su confinamiento. Y aunque es una relación que para Shirin no augura nada bueno, no es el único lazo de confianza que comienza a formar con el mundo que la rodea. Su hermano ha fundado junto a sus amigos un club de breakdance, y Shirin no dudará en sumarse ya que es una pasión que ambos comparten desde pequeños.

A medida que avanza el relato se van rompiendo uno a uno los estereotipos al mismo tiempo que comenzamos a ver un mayor desarrollo en el personaje de Shirin. Al principio se muestra reacia a cualquier tipo de contacto con las personas que no sean de su familia. Está absolutamente encerrada en sí misma, esparciendo constantemente un desprecio recíproco y que nace de cada mirada de terror, de cada insulto, de cada acción violenta que impacta en ella. Pero la persona antipática que muestra ser al principio va poco a poco menguando para permitirnos conocer sus pasiones, sus anhelos y su visión del mundo, incluyendo un alto porcentaje de material sentimental, claro que sí.

Dar vuelta cada página de este novela fue un completo placer. Hay una fuerte conexión con la historia, con los personajes, con el mensaje. Y creo que esto ha sido mayormente posible por la experiencia propia que vuelca la autora en el relato, ya que Tahereh Mafi ha confesado que se trata de uno de los libros más autobiográficos que ha escrito. No solo sus raíces logran la empatía y la identificación con la protagonista, sino que además deja ver otro de sus lados más creativos: el breakdance. No solo ha demostrado su pasión por este baile, el cual suele practicar, sino que ha sabido transmitirlo con gran energía a su personaje. 

Con este clima tan radical y fresco, el romance logra fluir y cautivar nuestro corazón, dándole a Shirin un interés romántico cuyo desarrollo toma lugar de manera inversa a la suya. Conocemos a Ocean, un alumno casi anónimo, a través de sus detalles con Shirin y de su infatigable plan de conquista, para luego descubrir el gran estereotipo que se esconde detrás de él. Sin embargo, estos polos opuestos nos ofrecen momentos muy dulces e inspiradores. Y en cuanto al resto de los personajes se refiere, agradezco de corazón la importancia que la autora le da a las familias de Shirin y Ocean, porque evidentemente se ha encargado de escribir personajes reales y no adolescentes librados al azar. Hay un fuerte trasfondo cultural, de intereses y valores que construyen personajes secundarios independientes, que no solo surgen como punto de apoyo de los protagonistas, sino que intervienen activamente en las decisiones que estos toman, conformando así un marco de credibilidad óptimo para este contemporáneo juvenil.

Si bien los elementos elegidos para narrar esta historia son importantes y, de hecho, acertados, lo que me cautivó en gran manera fue la pluma de la autora. Su estilo es absolutamente sencillo, para nada rebuscado, logrando un ritmo tan hipnotizante que te lleva a devorar sus páginas y a pedir más. Pero si de expectativas hablamos, el libro es magnífico pero siento que una vuelta de tuerca más podría haber sido aún mejor. No es para nada casual la ubicación espacio-temporal que Mafi le da a su novela. Sabemos que el racismo en los Estados Unidos es moneda corriente, y también podemos entender la magnitud que supone que su protagonista, una adolescente musulmana, asistiera a un típico colegio norteamericano, llevando su cabello envuelto en un hiyab, tan solo un año después del ataque a las Torres Gemelas. A pesar de que creo que ha sido una decisión más que acertada, siento que este elemento no fue explotado, que podría habernos ofrecido un relato aún mucho más impactante, más aún sabiendo que el blanco de esta historia no era precisamente el romance interracial, sino más bien, el poderoso mensaje que guarda.

Al otro lado del océano no es solo una historia emotiva, cautivadora y personal, sino que es un llamado a la reflexión sobre cómo nos relacionamos con lo diferente, con lo que desconocemos o no entendemos del todo. Nuestra opinión personal es importante, pero muchas veces no refleja la realidad y es importante tenerlo en cuenta en nuestras acciones, porque a la hora de enfrentar lo desconocido puede marcar una gran diferencia: nos acerca o nos aleja. En la historia de Shirin vemos ambos, y descubrirlos resultó una experiencia gratificante. Una lectura absolutamente recomendada.

“Quizás era suficiente haber aprendido que el amor era el arma inesperada, el puñal que yo necesitaba para atravesar la rígida armadura que llevaba puesta todos los días..”

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