Wrap up Febrero

¡Hola bookworms! ¿Qué los encuentra leyendo este hermoso martes de víspera de otoño? Yo estoy hiper mega enganchada con Ready Player One de Ernest Cline. En menos de dos semanas estrena la peli  y no podía no leerlo, más sabiendo que lo compré hace años y había quedado olvidado en mi biblioteca. ¡Una excelente oportunidad! ¿Ustedes lo leyeron?  Por otro lado, estoy leyendo la obra completa de Beatrix Potter. Siguiendo la línea de adaptaciones cinematógraficas, me sentí motivada por el próximo estreno de Peter Rabbit. Aunque la verdad es que siempre me sentí atraída por el trabajo de autores infantiles británicos como A. A. Milne (Winnie The Pooh), Michael Bond (Paddington Bear) y la misma Potter. Pequeñas excentricidades, lo sé. Creo que todo se debe a la nostalgia que transmiten el estilo de las ilustraciones, que me transportan directo a mi infancia, sumado a los paisajes tan británicos y campestres.

Y luego del pequeño update de mis lecturas, es tiempo de hacer rewind y contarles sobre mis lecturas del mes pasado. Fueron muy variadas en cuando al género y las temáticas y todas superaron las tres estrellas por lo que vale decir que fue un buen mes.

Éste es el wrap up de febrero.

Alguien está mintiendo (Karen M. McManus)

★★★★★

Sin dudas fue mi favorito de febrero. Como he dicho reiteradas veces, no le doy la máxima calificación porque sea una obra maestra o la revelación del año, porque se aleja mucho de esto. Sin embargo, en materia entretenimiento se luce. Es un libro juvenil de calidad, sin pretensiones, muy bien narrado y que mantiene cautivo al lector de principio a fin. ¿De qué va la historia? Cinco alumnos se encuentran castigados y durante la hora posterior a clases, en la que deben cumplir su castigo, uno de ellos muere en extrañas circunstancias (tranquilos que no es spoiler, es el factor desencadenante con el cual el libro es vendido). El problema es que nadie entró ni salió del aula cuando sucedían los hechos, por lo que se considera que uno de los cuatro restantes es el asesino. Todos tenían motivos para hacerlo, pero el enigma es ¿quién de ellos fue? A medida que el relato avanza se ahonda en cada uno de los personajes y se dan a conocer ciertos pormenores. Sólo hay una certeza: todos mienten. 

Cuando hablo de calidad créanme si les digo que el trabajo de la autora es impecable. Lo que más resalto es el hecho de que creó personajes partiendo desde los típicos clichés de secundaria pero les supo dar un giro y cada uno se adueñó de una personalidad única y verosímil. El suspenso es otro punto fuerte de la obra. No decae en ningún momento, por lo que tranquilamente se podría devorar el libro en una sola sentada.

Mensajes en las paredes del baño (Julia Walton)

★★★

Reseña por aquí

Empecé a leerlo en enero. Avancé unos pocos capítulos pero fue un mes caótico en lo personal y tuve que pausarlo. En febrero lo retomé desde cero y pude darle la atención necesaria. 

El atractivo principal reside en la temática del libro, que indaga en la esquizofrenia, una enfermedad mental prácticamente escasa en la literatura juvenil, y en cómo el personaje que la padece intenta llevar una vida común y corriente. Una perspectiva diferente, ya que la autora hace más hincapié en la experiencia en primera persona que en la compasión del entorno, que suele ser más que común a la hora de abordar estos temas.

Un pequeño gran dato: ya comenzó la preproducción para la adaptación cinematográfica. ¿Quién más está contento con la noticia?

Toda una vida (Robert Seethaler)

★★★★

También empecé este libro en enero, pero en el caos de mi casa, lo perdí. Sí, ¿a quién más le pasan estas cosas? *rolling eyes* Lo bueno es que al tiempo lo encontré (tampoco estaba tan preocupada porque sabía que no había salido de casa y eventualmente lo iba a encontrar) y una vez más lo empecé desde cero. ¿Se dieron cuenta de mi toc? Si abandono un libro después no puedo retomarlo donde quedé, tengo que ir sí o sí a la primera página o podría explotar todo.

Es un libro muy especial porque me lo regaló husband para Navidad y sus elecciones son muy particulares y difieren mucho de lo que acostumbro leer. Toda una vida me sorprendió gratamente por su gran calidad literaria. El autor, de nacionalidad austriaca, narra toda la vida de su personaje en poco más de cien páginas. Indaga tanto en la vida personal del mismo como en los cambios sociales, políticos y culturales de su entorno. La cantidad de palabras justas para expresar una montaña rusa de emociones, especialmente la añoranza y la melancolía que predominan en el relato. La reseña está lista, pero mi otro toc no me permite publicarla sin sus correspondientes fotos. Sepa disculpar las molestias.

El perro del peregrino (Liliana Bodoc)

★★★★

Reseña por aquí

Últimamente lo que leo de Bodoc no sale del género infantil. Sepan que sus historias valen la pena, sin importar la edad. Tiene mucha poesía y nunca deja la metáfora de lado. Es una gran maestra de la vida y se lo ve reflejado en todos y cada uno de sus libros. En éste en particular, reversiona la historia del Mesías, relatando la conocida historia desde un nuevo y peculiar punto de vista.

En el libro, un pequeño perro callejero es rescatado por el mismo Jesús y con el tiempo se convertirá en su fiel compañero, acompañándolo en sus andanzas, descifrando con su cristalina mirada los sentimientos y las intenciones que ocultan los seres humanos. Una nueva postura para una temática poco trabajada en la narrativa infantil contemporánea.

Y esas fueron todas mis lecturas de febrero. Como ya habrán notado el favorito del mes fue Alguien está mintiendo con una mención especial para Toda una vida. Cada uno en su género resultaron ser excelentes lecturas y, por cierto, muy recomendables. Ustedes ¿leyeron algunos de estos libros? 

¡Nos leemos!